miércoles, 3 de marzo de 2010

¡¡BLASFEMIA!!


Partiendo del principio de que no es correcto injuriar a nadie, ni nisiquiera a personajes de ficción tan odiosos como Ally McBeall, y que el Espiritu de Dios no es patrimonio de nadie, vamos a a pasar al asunto que nos demanda... El entrenador del Chievo Verona, Domenico di Carlo, se convirtió este pasado fin de semana en el primer sancionado por blasfemia de la Primera División de fútbol de Italia, en virtud de una nueva normativa de infracciones para los partidos aprobada por la Federación Italiana de Fútbol. ¡Ah!, Italia, el modelico pais cuyo mujeriego presidente tiene "presuntos" tratos con la mafia, el pais en el que desde hace siglos tiene cobijo el Vaticano, ese estado cuyo catolico maximo representante condena el uso del preservativo en África, pero oculta los casos de pederastia entre sus sacerdotes. ¡Ah! Italia... Bueno, pues según el árbitro, el entrenador Di Carlo profirió en el minuto 3 del segundo tiempo del encuentro entre el Chievo y el Cagliaridel pasado fin de semana "una expresión blasfema". Vale, pero ¿acaso lo hizo con un megáfono?... ¿Que será lo próximo?, ¿Jueces de linea gritando: "¡¡LA SEÑAL DE SATÁN!!" al observar como un jugador celebra un gol de manera pintoresca?, ¿árbitros con alzacuellos?, pues, ¿como puede calibrarse una expresión como blasfema y ser castigada con la inmediata expulsión sin un previo juicio teológico ante un tribunal especializado?. ¿Podran los jugadores y entrenadores cagarse en Buda, Shiva o Mahoma? pues como deja entrever el diccionario la blasfemia religiosa solo afecta a Dios, Jesús, la Virgen y los Santos catolicos. ¿Castigarán cualquier alusión sobre el cesped de los jugadores argentinos sobre la supuesta divinidad de Maradona? ¿y si es el publico el que blasfema -y suele hacerlo agusto- cerraran el campo como en los casos de insultos racistas?. En fin, todo esto daria para un ensayo de más de mil paginas, así que mientras que al condenado no le torturen o quemen vivo en la purificadora hoguera...

No hay comentarios:

Publicar un comentario