Resulta que en el europeo pueblo de Cunit (Tarragona, 12.300 habitantes) el imán radical Mohamed Benbrahim-al que podemos ver sonriente en la foto superior- no se le ocurrió otra cosa mejor que intentar agredir físicamente, además de insultar y calumniar, a la musulmana moderada Fatima Ghailan, mediadora cultural del municipio, pues la buena (y libre) mujer tiene la malsana costumbre de no llevar velo y de relacionarse con vecinos no musulmanes. Hasta ahi nada anormal (desgraciadamente)… La empanada mental surge cuando Fátima, ejerciendo valientemente sus derechos, denuncia al imán y la policía se presenta a detenerlo. ¿Saben quien intermedio por el imán y evito su detención? ¡¡La alcaldesa!!, si amig@s, la socialista, o mejor dicho, la “sociatonta” Judit Alberich, que en un alarde de empanada mental dijo que “El inspector de policía pretendía detenerle pero lo impedí a efectos de no crear un conflicto social” (Sic). Mal vamos… muy mal… Como apunta un portavoz de S.O.S Racismo al respecto de este caso “Retirar y silenciar este tipo de denuncias en aras de una paz social solo perpetua una situación que puede generar mayores conflictos abiertos”… Como sobran los comentarios ante tal empanada mental, aquí dejamos a la alcaldesa uno de los carteles que el gobierno de su propio partido ha lanzado respecto al tema, mas que nada para refrescarla la memoria, de que el autentico conflicto social es no intervenir ante los maltratos, vengan de moros o de cristianos…
ole y ole Ra, muy bién escrito, por cierto el imán ha salido muy favorecido, pero me he fijado bién y el no lleva el tipico vesturario musulman, al menos es la foto.
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